En el mensaje del fin de semana escuchamos que: «Si quieres cambiar tu vida, cambia tus prioridades». El Diccionario Oxford define una prioridad como «algo que se considera más importante que cualquier otra cosa». La definición es bastante simple, pero hablar de nuestras prioridades y asumirlas es algo completamente diferente. Para entender cuáles son nuestras prioridades, debemos analizar nuestras acciones diarias y a qué dedicamos nuestro tiempo y talento. Lo que nos ocupa nos revelará nuestras prioridades. Al estudiar, recordaremos que conocer a Cristo debe ser nuestra prioridad más importante.
¿Alguna vez has sido un "depintfiestas" (“party pooper”)? ¿¿Qué pasó?
Estudio Bíblico
1. ¿Qué cosas prioriza la gente hoy en día?
2. Lee Lucas 10:38-40. Compara y contrasta las acciones de Marta con las acciones de María. ¿Qué revelan sus acciones sobre sus prioridades?
Lucas 10:38-40
38 Durante el viaje a Jerusalén, Jesús y sus discípulos llegaron a cierta aldea donde una mujer llamada Marta los recibió en su casa. 39 Su hermana María se sentó a los pies del Señor a escuchar sus enseñanzas, 40 pero Marta estaba distraída con los preparativos para la gran cena. Entonces se acercó a Jesús y le dijo: —Maestro, ¿no te parece injusto que mi hermana esté aquí sentada mientras yo hago todo el trabajo? Dile que venga a ayudarme.
3. ¿Qué impidió que Marta hiciera del conocer a Cristo una prioridad?
4. Lee Lucas 10:41-42. ¿Qué muestra la respuesta de Jesús a María sobre lo que Él más valora?
Lucas 10:41-42
41 El Señor le dijo: —Mi apreciada Marta, ¡estás preocupada y tan inquieta con todos los detalles! 42 Hay una sola cosa por la que vale la pena preocuparse. María la ha descubierto, y nadie se la quitará.
1. ¿Con quién puedes relacionarte más, con María o con Marta? ¿Por qué?
2. En función de tus acciones diarias y de la forma en que pasas tu tiempo, ¿qué cosas estás priorizando actualmente y cómo están afectando estas prioridades tu relación con Cristo?
3. ¿Qué cosas están distrayendo de hacer del conocer a Cristo una prioridad?
Comparte con tu grupo un paso que puedes dar para que conocer a Cristo sea una prioridad. Luego, concluyan el tiempo juntos orando, pidiéndole a Dios que les ayude a vivir para la eternidad en lugar de las cosas temporales de esta tierra.
En el mensaje del fin de semana aprendimos que tres cosas que nos impiden priorizar nuestra relación con Cristo son las distracciones, las ocupaciones y nuestros propios miedos y preocupaciones. Si examinamos nuestra vida, sin duda veremos cómo estas tres cosas —las distracciones, las ocupaciones y nuestros miedos y preocupaciones— nos impiden crecer en nuestra relación con Dios y priorizarlo. En los próximos momentos, busquemos en las Escrituras cómo podemos luchar contra cada una de estas cosas para seguir creciendo en nuestra relación con Dios y priorizarlo.
Quizás las distracciones son lo que más nos impide enfocarnos en Cristo y priorizarlo. Cuando nos centramos en todo lo que nos rodea, ya sea nuestra interminable bandeja de entrada, nuestras listas de tareas, las notificaciones del teléfono o cualquier otra cosa, no podemos enfocarnos verdaderamente en Cristo ni priorizarlo si estamos constantemente distraídos. Veamos cómo las Escrituras nos enseñan a luchar contra las distracciones que nos impiden priorizar a Cristo.
1. Lee Hebreos 12:1-2.
Hebreos 12:1-2
12 Por lo tanto, ya que estamos rodeados por una enorme multitud de testigos de la vida de fe, quitémonos todo peso que nos impida correr, especialmente el pecado que tan fácilmente nos hace tropezar. Y corramos con perseverancia la carrera que Dios nos ha puesto por delante. 2 Esto lo hacemos al fijar la mirada en Jesús, el campeón que inicia y perfecciona nuestra fe. Debido al gozo que le esperaba, Jesús soportó la cruz, sin importarle la vergüenza que esta representaba. Ahora está sentado en el lugar de honor, junto al trono de Dios.
2. ¿Cómo nos detienen las distracciones, según este pasaje de las Escrituras?
3.¿Cómo han afectado específicamente las distracciones en tu vida tu relación con Cristo?
4. Según este pasaje de las Escrituras, ¿cómo dejamos ir las cosas que son distracciones en nuestras vidas?
Junto con las distracciones, nuestras agendas y planes apretadas a menudo nos impiden priorizar a Cristo. Nuestros calendarios y planes abarrotados pueden impedirnos enfocarnos en Cristo y pasar tiempo importante con él. Las Escrituras nos recuerdan que debemos hacer una pausa en nuestro ritmo diario y centrarnos en Cristo y su reino.
1. Lee Salmo 46:10.
Salmos 46:10
10 «¡Quédense quietos y sepan que yo soy Dios! Toda nación me honrará. Seré honrado en el mundo entero».
2. ¿Cómo nos impide el ajetreo priorizar a Cristo?
3. Según este pasaje de las Escrituras, ¿cómo podemos luchar contra el ajetreo en nuestras vidas que nos impide hacer de Cristo una prioridad?
4. ¿Cómo se ve hoy en día "estar quieto" y centrarse en Dios?
Quizás no nos demos cuenta, pero nuestros propios miedos y preocupaciones pueden incluso impedirnos priorizar a Cristo. Nuestros miedos y preocupaciones a menudo nos causan ansiedad y desilusión, impidiéndonos enfocarnos en Cristo y priorizarlo. Cuando sentimos miedo y preocupación, la tentación es recurrir a otras personas o cosas para aliviar nuestros miedos y preocupaciones. En cambio, Cristo nos invita a recurrir a él cuando nos sentimos abrumados y agobiados por nuestros miedos y preocupaciones.
1. Lee Mateo 11:28-30.
Mateo 11:28-30
28 Luego dijo Jesús: «Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso. 29 Pónganse mi yugo. Déjenme enseñarles, porque yo soy humilde y tierno de corazón, y encontrarán descanso para el alma. 30 Pues mi yugo es fácil de llevar y la carga que les doy es liviana».
2. ¿Cómo nos impiden los miedos y las preocupaciones de priorizar a Cristo?
3. Resume la invitación que Jesús da en este pasaje de las Escrituras.
4. ¿Cuál es el resultado si aceptamos la invitación de Jesús en este pasaje de la Escritura?
¿Cuál de las tres cosas que nos impiden priorizar a Cristo te impide convertirlo en una prioridad en tu vida: las distracciones, las ocupaciones o el miedo y la preocupación? Comparte esto con tu grupo, junto con un paso específico, medible y alcanzable que puedas dar para combatir las distracciones, las ocupaciones, las preocupaciones o los miedos que te frenan. Al terminar, oren juntos. Comprométanse como grupo a priorizar a Cristo y pídanle que los ayude a todos en este esfuerzo.
24 Luego Jesús dijo a sus discípulos: «Si alguno de ustedes quiere ser mi seguidor, tiene que abandonar su propia manera de vivir, tomar su cruz y seguirme. Mateo 16:24
©2025 Sagebrush Church
