Esta semana, en nuestro estudio bíblico, profundizaremos en el mandato que Dios dio a su pueblo en Éxodo 20: «No codiciarás…» (versículo 17). Antes de comenzar, asegurémonos de tener una buena definición de la palabra «codiciar». Después de todo, codiciar no es una palabra que usemos a menudo. El Diccionario Oxford define codiciar como «anhelar poseer o tener (algo)». Esta definición nos ayuda a ver que todos hemos codiciado en algún momento. Todos hemos visto algo que alguien más tenía y lo hemos deseado con desesperación. Vivir así no nos beneficia. De hecho, compararnos con los demás y ser envidiosos solo empeora nuestra vida. En nuestro estudio bíblico de hoy, seremos desafiados a dejar atrás la comparación y la envidia, y a aprender a practicar la gratitud y a encontrar satisfacción en Cristo.
¿Qué cosas encuentra las gente comparándose a sí mismos y a sus vidas hoy en día?
1. Lee Éxodo 20:17. Resume este comando con tus propias palabras.
Éxodo 20:17
17 »No codicies la casa de tu prójimo. No codicies la esposa de tu prójimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su burro, ni ninguna otra cosa que le pertenezca».
2. Lee Proverbios 14:30. ¿Cómo nos afecta la envidia, según este pasaje de la Escritura?
Proverbios 14:30
30 La paz en el corazón da salud al cuerpo; los celos son como cáncer en los huesos.
3. Lee 1 Tesalonicenses 5:18. ¿Cómo contrarresta la gratitud la comparación y la envidia?
1 Tesalonicenses 5:18
18 Sean agradecidos en toda circunstancia, pues esta es la voluntad de Dios para ustedes, los que pertenecen a Cristo Jesús.
4. Lee Hebreos 13:5 ¿Qué revela este pasaje de las Escrituras sobre la comparación y cómo luchar contra ella?
Hebreos 13:5
5 No amen el dinero; estén contentos con lo que tienen, pues Dios ha dicho: «Nunca te fallaré. Jamás te abandonaré».
1. Cuando se trata de comparación, ¿cómo te va en una escala del 1 al 10? ¿Por qué?
2. ¿Cómo ha afectado negativamente la comparación a tu vida?
3. ¿Cómo puedes luchar contra la tentación de comparar y ser envidioso basándote en las Escrituras que leemos hoy?
Una de las maneras de combatir la tentación de comparar es practicar la gratitud. En grupo, compartan por turnos algo por lo que estén agradecidos hoy. Compártanlo con su grupo. Después de que todos hayan compartido, agradezcan a Dios por lo que ha hecho en sus vidas. Comprométanse a mantener un espíritu de gratitud durante la próxima semana.
La comparación genera envidia, que puede destruir nuestras vidas si la permitimos. Hay una mejor manera de vivir que dejarse vencer por la envidia. En los próximos momentos, recurramos a las Escrituras para ver tres maneras de responder cuando la comparación nos tienta a envidiar y codiciar lo que tienen quienes nos rodean.
Aunque la envidia nos anima a sentirnos decepcionados, celosos y hastiados cuando otros reciben lo que queremos, estas emociones nunca nos benefician. Simplemente nos dejan tristes y vacíos. En lugar de centrarnos en nosotros mismos y en nuestras decepciones, la Escritura nos anima a celebrar con los demás.
1. Lee Romanos 12:15-16.
Romanos 12:15-16
15 Alégrense con los que están alegres y lloren con los que lloran. 16 Vivan en armonía unos con otros...
2. Resuma el mensaje en este pasaje de las Escrituras.
3. ¿Cuál es el resultado de obedecer este pasaje de las Escrituras?
4. ¿Por qué es crítico obedecer esta Escritura si queremos vivir vidas saludables y que honren a Dios?
La envidia nos tienta a luchar por nosotros mismos y por lo que queremos, incluso a costa de los demás. En lugar de responder a la comparación con celos, estamos llamados a ser personas que buscan la paz en todas las situaciones. Cuando tenemos la actitud de un pacificador, no nos comparamos con los demás ni nos molestamos cuando otros obtienen lo que deseamos.
1. Lee Romanos 12:16-18.
Romanos 12:16-18
16 Vivan en armonía unos con otros. No sean tan orgullosos como para no disfrutar de la compañía de la gente común. ¡Y no piensen que lo saben todo! 17 Nunca devuelvan a nadie mal por mal. Compórtense de tal manera que todo el mundo vea que ustedes son personas honradas. 18 Hagan todo lo posible por vivir en paz con todos.
2. ¿Cómo se interpa la comparación en el camino de obedecer la instrucción de este pasaje de las Escrituras?
3. ¿Cómo contrarresta la envidia tener la mentalidad de un pacificador?
4. ¿Cómo se ve en el mundo de hoy "hacer todo lo que puedas para vivir en paz con todos"?
Puede parecer obvio, pero si queremos dejar de ser envidiosos, debemos dejar de mirar a nuestro alrededor. Al fin y al cabo, cuando dejamos de mirar a nuestro alrededor, no compararemos nuestras vidas con las de los demás. En cambio, nos centraremos en Cristo, su reino y cómo él obra en nuestras vidas.
1. Lee Hebreos 12:1-2.
Hebreos 12:1-2
12 Por lo tanto, ya que estamos rodeados por una enorme multitud de testigos de la vida de fe, quitémonos todo peso que nos impida correr, especialmente el pecado que tan fácilmente nos hace tropezar. Y corramos con perseverancia la carrera que Dios nos ha puesto por delante. 2 Esto lo hacemos al fijar la mirada en Jesús, el campeón que inicia y perfecciona nuestra fe...
2. ¿Cuál es el resultado de "mantener nuestros ojos en Jesús"?
3. ¿Cómo contrarresta la envidia el centrarse en Cristo?
4. ¿Cómo se ve en nuestro mundo hoy mantener nuestros ojos en Jesús?
¿En cuál de las tres áreas que vimos hoy necesitas crecer: celebrar con otros, buscar ser pacificador o enfocarte en Cristo? Comparte esa área con tu grupo y menciona una manera en la que puedes crecer en ella. Comprométete a dar ese paso para crecer a partir de esta semana.
Sean agradecidos en toda circunstancia, pues esta es la voluntad de Dios para ustedes, los que pertenecen a Cristo Jesús. 1 Tesalonicenses 5:18
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